Deja de adoptar una actitud de víctima - coaching vida

Es común que nos encontremos ante situaciones que nos desalientan y que ocasionan reveses en nuestros planes, la forma en que aprendemos a lidiar con estas situaciones determina la rapidez con la que logramos reincorporarnos a nuestra vida habitual y continuamos trabajando en nuestros proyectos. Mientras algunos aceptan las adversidades como algo normal y entienden que es parte de la vida, otros optan por victimizarse asumiendo una actitud negativa y contraproducente para los fines de su superación personal.

La victimización, en esencia, no contribuye de manera positiva a la resolución de problemas; lo único que logra es prolongar el sufrimiento sin que tomemos acciones efectivas para eliminarlo. A lo largo de esta guía, exploraremos los efectos perjudiciales de la victimización y las razones por las cuales es importante evitar adoptar este tipo de comportamiento.

Qué es la victimización?

La victimización es la actitud que consiste en querer ajustarnos al papel de víctima sin hacer nada por superar la situación que nos ha puesto en este estado. Victimizarse no aporta nada positivo, es una forma derrotista de ver la vida, ya que en vez de centrarnos en las soluciones nos enfocamos en el problema.

Las personas optan por victimizarse por muchos factores que ocurren a nivel subconsciente, entre ellos se encuentran:

• Necesidad de llamar la atención.

• Baja autoestima.

• Falta de autocrítica.

• Deseos de buscar un culpable a nuestros problemas.

Al victimizarnos, tratamos de enviar el mensaje de que no somos responsables de responsabilidades por la forma en la que nos sentimos, que otras personas son las culpables de nuestros problemas y que debemos ser tratados como víctimas en todo momento. No está mal que necesitemos un tiempo para recomponernos emocionalmente, el error se encuentra en querernos encasillar en el papel de la víctima sin hacer nada por superarlo.

Asume responsabilidades

Bajo la creencia de que la víctima nunca es responsable de lo ocurrido, algunas personas se sienten más tranquilos cuando permanecen en este estado. Debemos ser capaces de asumir las responsabilidades de los hechos que nos afectan, de una forma u otra intervenimos en cada situación que se relaciona con nosotros. Si bien no podemos manejar ciertos elementos externos a nuestra persona, sí podemos escoger cómo vamos a afrontar cada una de las adversidades y qué mentalidad ponemos en nuestras acciones.

Salir de la depresión y adoptar una actitud positiva lo más pronto posible es algo que depende exclusivamente de nosotros, por lo que buscar un culpable a nuestro bajo espíritu de superación es una actitud cobarde que debemos de evitar en todo momento.

Enfócate en el presente

Lo que ya ocurrió es parte del pasado, y repetir los mismos recuerdos una y otra vez con el fin de volver al papel de víctima no es una actitud inteligente. No importa que tan malo sea aquello que te haya pasado, ahora toca enfocarse en el presente. Mientras más rápido puedas incorporarte a la realidad, antes podrás recuperarte de los daños y elaborar estrategias para recuperar lo perdido.

Al superar una situación adversa, lo que queda es hacer un balance de lo sucedido con el fin de aprender de los errores, no para sentir pena de ti mismo o buscar que otros tengan lástima por ti. Todo lo que está en el pasado ya escapa a tus posibilidades, no puedes modificar lo que ya pasó, pero sí puedes prevenir que esto no se repita. Cuando creas que te estás victimizando intenta cambiar tu pensamiento hacia uno más racional, analiza si vale la pena perder el tiempo en lamentaciones o sí ya es momento de volver a trabajar en tu presente.