Molibdeno: Necesidades Nutricionales

El molibdeno es un mineral muy beneficioso para la salud del cuerpo humano, participa en numerosos procesos y funciones biológicas que se suscitan en el interior de nuestro organismo, por lo que ha sido comprendido dentro del grupo de los minerales esenciales para el normal funcionamiento de nuestro cuerpo. Al ser un micromineral, las dosis que debemos consumir del mismo para satisfacer los requerimientos de nuestro cuerpo no son muy altas. Una adecuada ingesta de alimentos, balanceados y nutritivamente ricos, es suficiente a la hora de mantener buenos índices de molibdeno.

Es importante que comprendamos cuáles son los aportes de este nutriente, de esta forma podemos concientizar sobre la importancia de cuidar nuestros hábitos alimenticios para preservar buenos patrones de salud.

Durante el desarrollo de la presente guía, profundizaremos más respecto a las propiedades y funciones que cumple este importante mineral. De igual manera, estaremos repasando cuáles son las cantidades recomendadas de este nutriente para nuestro organismo, las fuentes desde las que podemos adquirirlo y los perjuicios para nuestra salud de consumirlo en exceso.

Beneficios generales del molibdeno

El molibdeno cumple varias funciones esenciales en el cuidado de la salud de nuestro cuerpo. Como mineral esencial, su impacto en los procesos internos de nuestro organismo es de gran escala. Una de las funciones principales del molibdeno, es la contribuir en el procesamiento de las proteínas que adquirimos mediante nuestra alimentación y participar en la conformación de nuestro material genético.

Este nutriente también forma parte de los mecanismos de desintoxicación de nuestro cuerpo. El consumo de fármacos trae aparejado la inclusión de diversos quimicos que pueden llegar a ser tóxicos o nocivos, el molibdeno contribuye a que nuestro organismo logre desechar estos quimicos con mayor facilidad.

¿Cómo obtener molibdeno?

Si bien es cierto que existen diversos suplementos nutricionales que contienen molibdeno en su composición o que son exclusivamente de este mineral, la fuente más recomendada para su adquisición siempre será la fuente alimenticia. Para satisfacer los requerimientos diarios de este nutriente en nuestro organismo, podemos acceder a diversos alimentos ricos en este mineral, por ejemplo, tenemos: Las legumbres, huevos, pollo, carne de res, queso, leche, yogur, otros productos lácteos, patatas, diversos vegetales, frutos secos como las nueces, guisantes, arroz, granos integrales, entre otros.

Afortunadamente, como podemos apreciar, las fuentes alimenticias ricas en molibdeno son muy variadas, lo que nos permite adaptarlas a conveniencia del tipo de dieta que sostenga el individuo.

Consumo adecuado de molibdeno

Es importante que nos documentemos sobre cuáles son las dosis de molibdeno que demanda nuestro organismo para funcionar con eficiencia. La carencia de este mineral puede derivar en la aparición de diversos trastornos que pueden llegar a ser muy peligrosos pa