¿Cómo planificar menús equilibrados?

La alimentación es uno de los aspectos más importantes en el desarrollo de los niños y niñas, ya que influye directamente en su crecimiento físico y mental.

Por tanto, es fundamental que los padres y cuidadores les brinden una alimentación adecuada y equilibrada que cubra sus necesidades nutricionales. Una buena planificación de los menús es clave para lograrlo. Con la planificación contribuimos a garantizarles una dieta más balanceada.

Conoce las necesidades nutricionales de los niños y niñas

Antes de comenzar a planificar los menús, es importante conocer las necesidades nutricionales de los niños y niñas según su edad y actividad física. De esta forma, podrás garantizar que los menús que prepares cubran todas sus necesidades. Por ejemplo, los bebés lactantes necesitan leche materna o de fórmula, mientras que los niños y niñas en edad escolar necesitan una mayor cantidad de nutrientes debido a su crecimiento y actividad física. Es importante que consultes con un profesional de la salud para obtener información detallada sobre las necesidades nutricionales según la edad y actividad física del niño o niña.

Varia los alimentos

Una buena planificación de menús equilibrados implica incluir una variedad de alimentos que aporten diferentes nutrientes. Es recomendable incluir alimentos de todos los grupos alimenticios, tales como:

• Frutas y verduras: son una fuente importante de vitaminas y minerales. Deben estar presentes en todas las comidas.

• Cereales y derivados: son una fuente de energía. Se recomienda optar por cereales integrales.

• Proteinas: son necesarias para el crecimiento y reparación de tejidos. Se pueden obtener de carnes, pescados, huevos, legumbres y frutos secos.

• Lácteos: son una fuente importante de calcio y proteínas. Se recomienda optar por opciones bajas en grasas.

Es importante variar los alimentos para garantizar que el niño o niña reciba todos los nutrientes necesarios. Además, es una buena forma de estimular su paladar y evitar la monotonia en las comidas.

Controla las porciones

Otro aspecto a tener en cuenta en la planificación de menús equilibrados es el control de las porciones. Es importante que las porciones sean adecuadas para la edad y actividad física del niño o niña. Un buen truco para controlar las porciones es utilizar platos pequeños, ya que de esta forma les parecerá que la porción es mayor y se sentirán satisfechos con menos cantidad de comida.

Evita los alimentos procesados y azúcares añadidos

Los alimentos procesados y con azúcares añadidos no aportan nutrientes necesarios y su consumo excesivo puede generar problemas de salud a largo plazo. El consumo frecuente de este tipo de alimentos puede provocar aumento desmedido del peso corporal en los niños debido a su alto contenido de grasa, sal y conservantes. La comida procesada eleva relevantemente los niveles de colesterol y la presión arterial. Es importante mantener a los niños bajo una dieta de alimentos libre de procesamiento industrial ya que necesitan crecer con una buena dieta equilibrada.

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