Conciencia social y empatia

Durante la presente guía estaremos abordando dos conceptos de especial importancia para el trabajo en equipo. Los conceptos a los que hacemos referencia son conciencia social y empatía. Ambos son pilares del desarrollo interpersonal, la comunicación y la productividad dentro de los grupos laborales. Gracias a la empatía podemos percibir las emociones de nuestros compañeros, saber cómo se sienten y enfocar nuestro trato de forma tal que no generemos contradicciones en ellos. La conciencia social es una herramienta de gran utilidad, nos hace mejores personas y nos permite transmitir un mensaje más efectivo hacia el grupo que nos escucha.

Dicho lo anterior, veremos a continuación en qué se basan cada uno de estos conceptos.

Empatia

Empatía es definido como la capacidad de ponernos en el lugar de la otra persona. Es un rasgo de la personalidad de suma importancia, las personas que carecen de empatía se acercan a los rasgos sociópatas, no lograr generar afecto entre las personas que lo rodean y les cuesta mucho trabajo relacionarse en sociedad. Todo líder que desee ser respetado y querido debe ser empático, saber leer el estado emocional de quien interactúa con él.

Gracias a la empatía podemos manejar las conversaciones hacia un punto de entendimiento. Para desarrollar esta habilidad, basta con preguntarnos cómo se está sintiendo la persona que habla con nosotros, cómo le puede afectar mis palabras y acciones. Si verdaderamente queremos que se nos entienda, que nuestro mensaje cause el mayor efecto posible es importante pensar como el que nos escucha, salir de nuestra percepción para tratar de observar las cosas como las aprecia nuestro compañero. Solo viendo las cosas como las ve la otra persona podemos medir el impacto que tendrá nuestro mensaje en él.

La empatía es ampliamente utilizada en el marketing, en la política, las negociaciones y casi cualquier ámbito que implique relacionarse con otra persona.

Conciencia social

La conciencia social es la habilidad que consiste en reconocer y apreciar los problemas y vicisitudes por las que estás transitando determinado grupo o colectivo social. Desarrollar la conciencia social nos hace sensibles hacia cuestiones que no nos afectan personalmente, tal es el caso de las minorías más discriminadas, quienes sufren cuestiones ajenas a nuestra cotidianeidad pero que podemos percibirlas y sufrirlas al igual que ellas, identificándonos y apoyando sus causas.

La conciencia social en el colectivo laboral posee el mismo impacto que en el ámbito social. Nuestro colectivo de trabajo es como una pequeña sociedad, con sus problemas, sus aspiraciones, deseos e inquietudes. Desde nuestra posición no podemos experimentar cuáles son las cuestiones que más aquejan a nuestros trabajadores, pero haciendo uso de la conciencia social podemos ponernos en el lugar de ellos para entender por qué se sienten de tal manera y cuál es la solución más adecuada a sus problemas.

La conciencia social es una capacidad imprescindible para todo jefe o líder que pretenda mantener a sus trabajadores contentos y satisfechos en su ambiente laboral. A menudo la conciencia social suele ser confundida con la empatia, ya que comparten muchos rasgos similares.

La Conciencia social y empatia

La diferencia fundamental entre la conciencia social y la empatía es que la primera está enfocada en los colectivos. Nos induce a sentir como siente determinado grupo que comparte una serie de experiencias y situaciones propias, ajenas a nuestra cotidianeidad. Por otro lado, la empatía es algo más personal, enfocada en un individuo en particular, con el que nos estamos relacionando y queremos comprender sus sentimientos, estado de ánimo y el efecto que provoca nuestro mensaje.

Ambos conceptos son de suma importancia y deben ser trabajados a diario como meta básica de nuestro desarrollo personal y profesional.