Planificación de la primera sesión (II)

Determinar las preocupaciones del cliente

Algunos clientes de inmediato plantean el problema que los acucia , quieren avanzar, pero no saben cómo hacerlo, expresan lo que esperan del coaching y responderán de inmediato al trabajo con objetivos. Otros son más previsores y acuden al coach cuando sienten la presencia de un problema, éstos necesitan una dirección y un sentido hacia los objetivos para empezar a alejarse de su incómoda situación actual.

Cuando el problema está relacionado con el aprendizaje de alguna habilidad, bastarán una o dos sesiones. El coach clasificará el objetivo resultado, los valores que lo generan, identificará las posibles creencias limitadoras y construirá el plan de acción. Después de eso, solo basta estar disponible para cualquier apoyo por teléfono.

Otro tipo de cliente quizá necesite complejas entrevistas durante varias sesiones. Pueden existir creencias limitadoras y circunstancias adversas que necesiten de mucho trabajo, incluso puede que se necesite clarificar sus objetivos, también puede que el proceso de coaching ocupe varios aspectos de su vida, en ese caso, el proceso puede durar meses.

Por último, están los clientes que necesitan un cambio fundamental, entonces necesitan conversaciones más profundas. Probablemente necesiten coaching personal.

Sea cual sea la cuestión, siempre es bueno explorar:

• ¿Cómo sabrán los dos que el programa de coaching está funcionando?

• ¿Qué tendrá que hacer el cliente?

• ¿Qué tendrá que dejar de hacer?

• ¿Cuáles de los hábitos que tiene están manteniendo el bloqueo?

• ¿Qué costumbres hay en su vida que le impiden avanzar?

• ¿De qué va a necesitar más?

• ¿Qué tendrá que hacer de forma diferente?

• ¿Qué ejercicios y tareas puedes asignarle que le ayuden a realizar todo lo anterior?

Proyectar una alianza de coaching

Se puede diseñar esta alianza poniendo en las manos del cliente una hoja con estos planteamientos:

• El coaching funciona bien para mi cuando el coach hace lo siguiente.

• El coaching no funciona bien para mi cuando el coach hace lo siguiente.

El coach debe ser flexible, si no es capaz de adaptarse, se verá limitado solo a clientes de un mismo tipo. La alianza posibilita que el cliente se responsabilice con los resultados y soluciones.

El coach no tiene que decirle al cliente qué hacer, nunca será el dueño de la solución. En ocasiones el coach puede sugerir, incluso con vehemencia, pero la solución definitiva debe quedar en manos del cliente.

Si no fuera así, el cliente solo esperará que sea el coach quien realice los cambios, en caso de no haber progresos culpará al coach y éste puede incluso sentirse culpable de ello.

Responsabilizar a ambas partes con el programa

El coaching solo funciona si ambas parte están comprometidas con el proceso. Nunca se debe aceptar un cliente cuando no se está convencido de poder o querer ayudarlo y respetarlo por lo que es. En ese caso, de manera sincera, el coach debe recomendarle que vea a otro profesional.

No resulta sencillo que el coachee se comprometa, se le está pidiendo que asuma otro compromiso además de los que ya tiene (familia, trabajo, amigos, aficiones, etc.)

Para afianzar este compromiso, es bueno identificar los obstáculos que pueden influir en él. Estar conscientes de estos obstáculos, hará que ambas partes estén mejor preparados para comprometerse con el proceso: