Desarrollo personal y empresarial

A lo largo de nuestra formación como coach hemos llegado a comprender que gran parte del éxito empresarial depende de nuestro desarrollo personal y viceversa. Nuestro negocio se alimenta y enriquece de nuestro potencial de liderazgo para saber conducirlo con inteligencia. A medida que hacemos crecer nuestra empresa crecemos nosotros junto a ella, parte de esta visión complementa lo que llamamos desarrollo personal. Diariamente nos enfrentamos a retos que ponen a prueba nuestro nivel de profesionalidad y responsabilidad ante los negocios y la vida misma.

Crecimiento y desarrollo personal.

El desarrollo personal carga con la mayor fuerza a la hora de aplicar nuestro conocimientos para la vida en general, ya sea con nuestros familiares, amigos o compañeros de trabajo. Saber elegir o crear un adecuado ambiente de trabajo es una de las ventajas que obtenemos propiamente de este desarrollo constante donde nos desenvolvemos como coach. Este crecimiento profesional ayuda a establecer objetivos claros sobre nuestro rumbo, que queremos lograr con nuestros objetivos a largo o corto plazo. Con este desarrollo nos proponemos consolidar los aspectos básicos para nuestro éxito y el de nuestra empresa; tengamos claro que sin estos objetivos nuestra gran idea carecerá de valor y solo seremos uno más en el mercado intentando ganar dinero sin ofrecer algo diferente.

Capacidad de influir.

Como conocemos somos seres sociales y nos debemos a la sociedad para en ella alcanzar nuestro desarrollo, por tanto debemos fijarnos como Coach en la capacidad de ser influyentes en nuestro ámbito. Lidiamos diariamente con personas a las cuales tenemos el objetivo de guiar o entrenar en este largo camino. Siempre como Coach debemos tener claro que mediante la autoconsciencia podemos generar una autogestión para alcanzar las metas que nos planteamos. Influimos sobre nuestros compañeros de trabajo y clientes para lograr en estos la asimilación de capacidades que les ayuden a crear también para si una comunicación más estable y sostenible con su propio medio. A medida que logramos influir sobre nuestro medio podemos propiciar un mejor ambiente abierto a cambios con la idea del desarrollo personal para otros.

Habilidades y capacidades.

El desarrollo de las correctas habilidades y capacidades para nuestros semejantes, ya sea en los negocios o en la vida de interacción también significan un crecimiento personal. La comunicación nos ayuda a crear en nuestro alrededor un ambiente de confianza necesario para que el resto del trabajo sea algo divertido para todos. Una habilidad importante cuando socializamos es nuestra capacidad de escucha, donde el intercambio de criterios fortalece la construcción de confianza con nuestros semejantes y podemos conocer que preocupa a nuestros clientes en tema de trabajo. Cuando hablamos de habilidades y capacidades existen muchas, y el dominio de estas representa un paso de avance en nuestra vida, un crecimiento personal con el cual podemos enfrentar cualquier conflicto de manera inteligente y ganar más para nosotros y nuestra empresa.

La Motivación.

Aquí estamos frente a un reto que pocos se plantean, como motivar tu entorno. Gran parte de lo que podemos considerar un nivel de influencia en los otros es la motivación. Con ella podemos aclarar o hacer ver a los demás donde están las cosas importantes de valor como la responsabilidad o el respeto entre compañeros. Intentamos además incentivar el hábito de persistencia en las metas que nos planteamos y saber cómo aportar algo positivo a nuestro proyecto de vida. Una vez que conocemos qué nos motiva y cómo dar solución a nuestras preocupaciones tanto laborales como personales, podemos ayudar con más facilidad a nuestros clientes o compañeros de trabajo a encontrar su propio propósito, qué buscan, incentivando en ellos el propio desarrollo personal.

Liderazgo empresarial.

Cuando somos Coaches necesitamos mostrar capacidad de liderazgo, ¿cómo ser un líder? Es una pregunta que siempre aflora si estamos frente a un negocio y principalmente si tratamos con otras personas. Principalmente debemos ser un ejemplo a seguir para los demás en aspectos humanos, pues somos el reflejo de nuestra intención para el mundo; necesitamos estar claros de cuáles son nuestras responsabilidades. En el campo de los negocios un líder debe tener consciencia sobre el nicho de mercado, la demanda de nuestra oferta, nuestra competencia, nuestros recursos y nuestro valor para los clientes. Debemos tener siempre una respuesta oportuna ante las inquietudes de nuestros colegas de trabajo y nuestros clientes. El peso más grande está sobre los lideres a la hora de tomar decisiones para nuestra empresa, determinar ese rumbo que guiará a muchos hacia un éxito colectivo que también representará un logro personal. Un enfoque muy positivo de nuestro accionar como lideres es brindar ayuda a los demás, como podemos facilitar una mejor solución a los problemas que aparecen en el camino. Es importante conocer que somos una referencia para nuestro equipo de trabajo y en especial para el mercado donde nos desarrollamos y cualquier error tiene repercusión para la empresa en particular.

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