Transcripción Trazando tu línea de la vida y sus hitos
Estamos familiarizados con las líneas del tiempo, sobre todo en las clases de historia y ciencias naturales resultan muy útiles para establecer una cronologia y para retener mejor todo el contenido. Una línea que nos permite apreciar la relación de los hechos a través del tiempo. Se escogen los eventos o fenómenos que vamos a estudiar y sus fechas, para colocarlos cronológicamente en una línea.
Una línea de la vida, es eso básicamente, pero en vez de estudiar personajes históricos, o hechos trascendentes del mundo, estudiaremos nuestra propia vida, con nosotros de protagonista. Los hechos más relevantes, nuestros éxitos y nuestros fracasos, las decisiones que hemos tomado, las circunstancias que nos formaron. Solo que al haberla vivido, le añadiremos información complementaria, no solo lo que pasó sino como lo experimentamos, nuestros sentimientos y pensamientos en ese momento.
Las personas tienen su historia pero viven su presente y se proyectan hacia un futuro, lo que los hace únicos. Somos la suma de lo que nos ha pasado, (y como en la macro historia humana) si logramos ordenar y analizar esa información podemos entender mejor las causas y las consecuencias, para darle un sentido al presente. Nos ofrece una oportunidad para cambiar o modificar nuestras creencias y conductas.
Creamos nuestra propia narrativa al interpretar la realidad, siempre con el prisma de nuestras creencias y emociones. Eventos que para otros no tienen mucha significancia pueden afectarnos y marcar acciones futuras.
Las personas buscan un coach con la esperanza de conseguir lo que piensan que necesitan. Un objetivo o una meta relativamente clara: mejorar su autoestima, mejorar su comunicación, alcanzar un determinado trabajo, desarrollar una habilidad. Sin embargo muchas veces la causa real que los limita no está clara, es necesario indagar.
La meta del proceso de coaching es que puedas descubrir por ti mismo lo que te hace falta, para llegar a donde quieres estar. Esta es otra herramienta usada en el coaching (y en la psicologia) para facilitar ese proceso. Sirve para ambos, tanto al coach para entender mejor a su cliente, como para que el propio cliente esté más cerca de conocerse y comprenderse a si mismo. Algo que le servirá para poder cumplir cualquier meta que se proponga.
Beneficios que puedes conseguir al hacer la línea de la vida.
Identificar las situaciones importantes de tu vida y como han influido en tus decisiones:
- Reconocer claramente por qué y cómo has llegado a la situación actual.
- Reconocer las personas que te han influido.
- Conseguir un mayor nivel de autoaceptación.
- Explorar, recuperar, registrar y conservar las memorias y emociones de la infancia y de eventos importantes de tu vida.
- Convertir la línea en un recurso con el que puedas acceder más fácilmente a toda esa información.
- Analizar todas las circunstancias personales y sociales que influyeron en los hechos de tu vida.
- Reflexionar sobre el nivel de objetividad de los recuerdos.
- Canalizar las emociones y trabajar para procesarlas constructivamente.
- Cerrar etapas, hacer un corte y empezar de nuevo.
- Hacer las paces con el presente y proyectarse hacia el futuro.
- Crear nuevas experiencias a tu medida, más adaptadas a tus valores y a la realidad que te rodea.
- Entender nuestra visión de la vida.
¿Qué se necesita para hacer la línea de la vida?
Esta herramienta te ofrece muchas ventajas y beneficios pero no es fácil de hacer. Es más que ordenar cronológicamente los eventos que consideramos importantes. Es necesario acompañar cada paso del proceso con mucha reflexión y concentración. Ser capaz de ir a la esencia y sintetizar la información también es importante. Debes profundizar en cada acontecimiento y sus circunstancias.
La asistencia de un coach resulta inestimable ya que conoce que preguntas hacer para sacar fuera todos los pormenores y guiar nuestra reflexión. Preguntas sobre los hechos pero también sobre los sentimientos que los acompañan y nuestra valoración actual sobre ese pasado.
No obstante es un buen ejercicio para hacer de manera independiente en cualquier momento que necesitemos un cambio en nuestra vida.
No se aconseja hacerlo en un momento doloroso o en estado de depresión, ya que el resultado se verá empañado de esos pensamientos y sentimientos y puede perjudicar más que ayudar.
Es inevitable que en el proceso surjan los si hubiera, pero este ejercicio no es para juzgarnos o arrepentirnos sino para poder construir un mejor futuro. Para ser capaces de hacer borrón y cuenta nueva y alcanzar nuestros objetivos.
Pasos para hacer la línea de la vida
Se trata de una representación gráfica de tu vida, donde podrás colocar espacial y visualmente todo lo significativo que te ha acontecido. Para esto puedes enfrentar la tarea en dos etapas si lo deseas. La primera es la creación de la línea como tal, o sea identificar y colocar en orden los sucesos. La segunda y más complicada es reflexionar y analizar criticamente cada suceso.
Primera etapa:
- Paso No. 1: Este es sencillo, los materiales papel, lápiz y colores es más que suficiente. Por supuesto puedes descargar una plantilla de Internet si te sientes más cómodo con los recursos digitales.
- Paso No. 2: Separa la línea en periodo de años para que te resulte más fácil, quizás por quinquenios o décadas y puedes destinar una hoja a cada una. Puedes colocar al final el presente, señala el momento actual y el motivo por el cuál decidiste hacer el ejercicio (esto es opcional).
- Paso No. 3: Comienza a colocar los eventos en orden cronológico. El nivel de detalle lo decides tú. Generalmente se identifican solo los que consideramos importantes, pero se puede ir ampliando durante el proceso.
Una vez identificados y señalizados en la línea todos estos eventos, procede a clasificarlos. Puedes utilizar diferentes colores para que puedas visualizar más claramente la información.
Los puedes clasificar de la siguiente forma:
- Los que representan hechos: los hechos como nacimientos, muert
linea vida