El dequeismo y queismo

El dequeismo

El dequeismo se produce cuando agregamos la preposición «de» antes de la conjunción «que» para forzar la secuencia «de que» aunque el verbo que rige la oración no lo exija. Veamos el siguiente ejemplo:

• Pienso de que podríamos arreglarlo.

• Pienso que podríamos arreglarlo.

En este ejemplo parece evidente que es innecesario el empleo de la conjunción «de», sin embargo para estar seguros podemos emplear los siguientes procedimientos.

Formular la oración en forma interrogativa. Si la pregunta debe ir encabezada por la preposición «de» entonces la preposición debe mantenerse; si no, no es correcto utilizarla. Por ejemplo:

• ¿De qué pienso sobre arreglarlo?

• ¿Qué pienso sobre arreglarlo?

Como podemos ver la oración en forma interrogativa sin la preposición «de» es correcta; por lo que no debemos emplear la preposición «de» en la oración que estamos comprobando.

Sustituir la oración subordinada ¾desde el «que» en adelante¾ por el pronombre demostrativo «eso» y determinar si es necesario poner la preposición «de» en la nueva oración. Si es necesario entonces la oración analizada también llevaria el «de»; si no, no es correcto utilizarlo. Por ejemplo:

• Pienso de eso.

• Pienso eso.

Esta oración sin emplear el «de» es correcta; por lo tanto debemos eliminar la preposición «de» de la oración para evitar el dequeismo.

El queismo

El queismo es la omisión de la preposición «de» antes de la conjunción «que» cuando lo adecuado es utilizar «de que». Por ejemplo:

• Es incorrecto escribir: *Me convenció que viniera.

• Lo correcto es escribir: Me convenció de que viniera.

En este ejemplo para comprobar la necesidad del empleo de la conjunción «de» practiquemos el método que utilizamos anteriormente.

Sustituyamos todo desde «que» por «eso» empleando la preposición «de». La oración quedaria:

• Me convenció de eso: La oración empleando «de» es correcta. Veamos de todos modos la oración sin emplear la preposición «de».

• Me convenció eso: En este caso consideramos que la primera oración es la adecuada, por lo tanto debemos colocar la preposición «de» delante de la conjunción «que» para evitar incurrir en el queismo.