Técnicas: Estrategias para la Crianza Responsable

Existen diversas técnicas para guiar la conducta de los niños. Es crucial tenerlas en cuenta para atrevernos a influir de manera enriquecedora en su personalidad.

Se pueden utilizar diferentes métodos como: economia de fichas, semáforo de conducta, técnica del sándwich, entre otras.

Seria ideal combinar y complementar todas las técnicas sin crear una adicción en su uso. Nuestro objetivo es fomentar un hábito saludable: el de portarse bien.

Equilibrar.

La técnica del sándwich se asemeja al mismo sándwich en el que las rebanadas de pan representan los elementos positivos y el relleno los elementos negativos. Decimos:

• Gracias por todos aquellos días en que organizaste tus juguetes. Aunque hoy no lo hayas hecho, es buena la actitud que has demostrado.

En este ejemplo se hizo mención al aspecto negativo: «aunque hoy no lo hayas hecho», pero de manera que no fuera tomado a la defensiva.

Identificar.

El semáforo de la conducta es una técnica visual para identificar lo positivo y negativo. Se utilizarán:

• Plumones.

• Una pinza.

• Papeles de colores rojo, amarillo y verde.

Cada color representa una emoción diferente, el rojo es tristeza, el amarillo indecisión y el verde felicidad. La pinza oscilará según la conducta del niño. Esta técnica tiene un margen de efectividad hasta los cinco años de edad.

Reforzar.

La economia de fichas es una técnica que fomenta el surgimiento de nuevas conductas a través de fichas canjeables por buenas acciones. Por ejemplo, para que un niño deje de decir malas palabras, se le muestra la nueva acción: un correcto uso del vocabulario.

Se les facilita cuatro o cinco fichas, con imágenes de algo que les fascine y se les explicará que las perderán en caso de decir malas palabras. Así,la probabilidad de obtener lo pactado disminuirá si pierden todas las fichas.

Imaginemos que el niño está interesado en los helados, en visitar el acuario y el zoológico. Podemos decirle: ‘Te daré tarjetas como recompensa cada vez que cumplas con lo que te pido. Por ejemplo, si te expresas sin utilizar un lenguaje grosero, podrás obtener lo que deseas’.

El valor de las fichas será el estipulado por nosotros mismos:

• Precio del helado: 5 tarjetas.

• Precio del acuario: 10 tarjetas.

• Precio del zoológico: 20 tarjetas.

Modificar.

Si el objetivo es eliminar una conducta, abordaremos la técnica como un juego en lugar de una regla estricta. Si tu hijo no se siente cómodo en su realización, puedes hacer uso de otras alternativas.

Para modificar la conducta, la teoria inversa de la economia de fichas suele ser efectiva. Este método se basa en las consecuencias inmediatas. Es decir, el niño puede darse cuenta rápidamente de lo que está haciendo mal y corregirlo.

Antes de utilizar la técnica, se le explicará que todo en la vida está controlado por reglas. Por ejemplo, si un peatón se salta un semáforo en verde, corre el peligro de ser atropellado. Todo acto tiene una consecuencia, a veces negativa y desafortunada.

Este principio se aplica en la vida cotidiana. Cu